Me encanta la historia de Jesús caminando sobre el agua, la podemos leer en Mateo 14 a partir del versículo 22, hay mil cosas en las que nos podemos enfocar:
- Jesús demostrando su deidad al desafiar las leyes naturales y caminar sobre el agua
- Lo volátil de la fe de Pedro primero al lanzarse al agua y luego hundirse
- La indecisión de los otros 11 al no aventarse como Pedro al agua
- Etc.
Platiquemos un poco del buen e incomprendido Pedro
28Entonces Pedro lo llamó:
—Señor, si realmente eres tú, ordéname que vaya hacia ti caminando sobre el agua.
29—Sí, ven —dijo Jesús.
No perdamos de vista que todos, los 12 discípulos estaban en medio de una tormenta, cundo ven a Jesús a la distancia, la tormenta no ceso, dice la biblia en la versión NTV que luchaban contra grandes olas y al verlo todos se aterraron… y cómo no? Quien rayos camina sobre el agua?? No tenían idea de que era lo que estaban viendo, pero Jesús les dice:
—No tengan miedo —dijo—. ¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí!
Y la realidad es que a pesar de las palabras de Jesús es difícil dejar de tener miedo, porque seamos honestos, las tormentas dan miedo especialmente si estas arriba de una barca frágil en medio de grandes olas.
Yo no sé qué pensó Pedro al bajarse de la barca, pero obviamente algo no salió conforme al plan porque todos sabemos lo que paso…
30 pero cuando vio el fuerte viento y las olas, se aterrorizó y comenzó a hundirse.
Y no nos pasa acaso lo mismo a nosotros?, no todo es miel sobre hojuelas en nuestras vidas, cuantas veces no te ha pasado que las cosas no salen como las tenias planeadas, el semestre en la escuela es más complicado de lo que pensabas, el maestro parece te habla en chino; compraste un carro pensando que si la librabas con los gastos y ahora ya no ves la salida; tomaste el reto de un nuevo trabajo y las nuevas responsabilidades parecen sobrepasarte.
En ocasiones tomamos pasos de fe en medio de una tormenta en nuestra vida y pensamos que tan pronto damos el paso la tormenta se va a calmar y no es así, la tormenta sigue igual de temible que antes… e igual que Pedro gritamos “Sálvame Señor”.
Lo que quiero que veamos es no solo el hecho que Pedro dudo y comenzó a hundirse, eso nos hubiera pasado a cualquiera, sino que en ese momento de terror donde se supo perdido, donde rápido reconoció el peligro en el que estaba, la Biblia no dice que trato de nadar de regreso a la barca o le pidió a sus amigos una soga o lo que sea, su reacción inmediata fue clamar por ayuda al único con el poder de rescatarlo, esa es la clave, el único que lo podía sacar de la tormenta era el único que no estaba siendo afectado por ella.
el único que te puede sacar de la tormenta es el único que no estaba siendo afectado por ella.
Y no solo Jesús impide que Pedro se hunda, acto seguido Jesús lo guía a través del agua hacia la barca.
Cuantos pasos dio Pedro de la barca hacia Jesús? Nadie sabe, pero con Jesús, Pedro camino lo que haya sido necesario para ir de la situación desesperada donde estaba hasta la barca, y ahí ya en la barca los vientos cesaron.
Quiero dejarte con esto…
El peor momento de tu vida, ese momento que tanto te aterra y del cual quieres salir con tanta desesperación puede ser justo el momento más memorable de tu vida, el lugar desde el cual tu mejor historia será contada.
Leo Lozano 